1.2.15

B.

El creía que podría dejarse llevar con el viento. Dejaba que éste le golpeara en la cara y abría los brazos, cerraba los ojos muy fuerte y pedía que por favor se lo llevara muy lejos. Pronto comprendió que el viento no le haría desaparecer. Aquel niño de la camiseta rota quería volar, siempre soñó con ser un pájaro marrón y perderse, y recorrer los caminos en busca de cochecitos de juguete oxidados, de los que cambian de color cuando no los miras. No encontró ninguno. La radio tocaba canciones que él no entendía, y las personas son malas aunque tu no lo sepas. ''La gente te hará daño si no les asustas, haz que todos teman de ti y se irán para siempre.'' Esa tampoco fue la respuesta.
A veces pienso que todo fue por mi culpa. 
A lo mejor tu corazón estaría menos roto si yo no estuviera aquí. 
Ojalá pudiera arreglarlo. 
Y ojalá todo te vaya bien. 



Te quiero.